Las parejas entran en conflicto y se discuten continuamente por motivos diversos: diferentes puntos de vista y opiniones, diferentes maneras de hacer, cuidar y convivir, malentendidos, etc. Cuando hay una buena comunicación y una relación sana, estos conflictos suelen solventarse de manera eficaz, fortaleciendo la relación de pareja.
Sin embargo, no siempre es así y muchas veces estos conflictos se convierten en problemas más grandes. Los problemas de pareja con frecuencia aparecen por la falta comunicación efectiva o el uso de estrategias no adecuadas para resolver el conflicto.